La baja rentabilidad del viñedo en España se acumula y acrecienta año tras año
Proponen implantar en Castilla-La Mancha el arranque definitivo del viñedo.
Los acuerdos comerciales con los países productores de vino del hemisferio sur provocan que las exportaciones desde la Unión Europea sean penalizadas.
Toledo a 19 de julio de 2024
El sector vitícola en España está atravesando unos años de muy baja rentabilidad, lo cual unido al aumento de costes tanto de mano de obra, como del resto de inputs, hacen inviables muchas explotaciones.
Esta situación tiene lugar especialmente en Castilla-La Mancha, donde el precio por kilo de uva la mayoría de veces es inferior al resto de España.
Por ello, y tras varios años consecutivos donde ni la sequía del año pasado ha conseguido subir el precio de forma razonable, solicitan desde la Unión de agricultores y ganaderos de Castilla-La Mancha que se pongan medidas en marcha (que ya han funcionado en años anteriores) como el Arranque Definitivo o la Destilación de Crisis (Comunidades como La Rioja ya la ha gestionado), con la intención de facilitar la salida generacional de agricultores que se jubilan, controlando así la producción.
Consideran igualmente que el Arranque Definitivo quita del mercado una cantidad de vino que sólo favorece a los agricultores a título principal, puesto que quien se acoge a esta medida precisamente no suelen ser ellos.
Respecto de la Destilación de Crisis se suele aplicar cuando hay excedentes importantes de vino en el mercado. Actualmente no los hay, lo cual no significa que los vaya a haber pronto, porque queda comprobado cómo viniendo de un año sin apenas producción debido a la sequía, aún así al mercado le ha costado mucho digerir el atranque que había con los vinos tintos, por lo que la destilación se plantea como una opción necesaria para el control del stock actual.
En resumen, comentan, «menos mal que el año pasado no hubo vino tinto por sequía extrema», pero todo apunta a que esta campaña sí lo va a haber y habrá que preparar soluciones, y no esperar a que se arregle el problema sólo, porque está claro que este problema sólo no se arregla.
En tercer lugar, aseguran que la competencia desleal que generan los acuerdos con Mercosur y otros países del hemisferio Sur, dificulta las importaciones de vino europeo, donde a la hora de comercializar y exportar desde España, se tasan los vinos con entre un 49% de impuestos si es venta a granel o un 57% si es venta embotellada. Este extra de impuestos frente a terceros países complica la salida del producto elaborado en la Unión Europea.






